Burren escribió:
Ya, se pone serio, pero de momento no me lo puedo tomar de otra manera...
No lo digo por tí eh, ya dije antes que no me atrevo a decirte nada aquí, para eso debería conocerte y tal...
A tí lo único decirte que lo lleves lo mejor que puedas.
O contarte mi caso similar, intentando resumir.
Casi 11 años de relación con absoluta fidelidad, total entrega y compromiso por parte de los dos y anteponiendola a cualquier otra cosa en el mundo. Hasta que un día decidió convertirse en una zorra, coincidiendo además con la peor etapa de mi vida debido a una enfermedad relativamente grave. También quería seguir siendo amigos, pero yo lo tenía claro, era o todo o nada, así que en los últimos tres años después de haberlo dejado habré coincidido con ella una media docena de veces, nunca le he negado el saludo ni la conversación, y a pesar de que la querré toda mi vida, ni la echo de menos ni quiero saber nada de ella, no le deseo ningún mal pero tampoco ningún bien, me provoca indiferencia absoluta.
Y después, como había empezado aquella relación de jovencito del todo y tenía cero experiencia con el bando enemigo, cuando fui conociendo el percal establecí ciertas reglas que cumplo y cumpliré siempre a rajatabla:
1- No follar con alguien a quien no conozco. No hay nada peor que compartir cama después del sexo con alguien y darte cuenta que no hay un solo tema en común del que estés cómodo hablando. Primero el cerebro y luego la carne.
2- No follar con nadie que esté bajo los efectos del alcohol y las drogas. Yo hace muchos años que no bebo ni me meto nada así que quiero a cambio lo mismo, al menos para el sexo y las relaciones de pareja en general. Si quiere salir un día con sus amigas y ponerse hasta el culo no hay problema, pero conmigo que no cuente para eso. Exigencia de consciencia plena.
3- No follar con nadie que acabe de dejar una relación o esté en una relación. Las cosas claras, que ya bastante variables son las mujeres de por sí como para encima meterse en temas de sentimientos y deseos encontrados. No fiarse de nadie que esté dispuesta a estar contigo si está con otro, porque luego podría hacerte a tí lo mismo.
4- No fiarme de nadie que no demuestre con hechos las cosas que dice. Facta non verba.
Si hasta yo puedo ponerme serio a veces y todo. Y soltar unas txapas de cuidao...