carlesoffilth escribió:
Se empezó pot Txus, se siguió por Ulrich, seguidamente le tocó a Jordison, seguimos con Portnoy y ahora hemos llegado a Chad. Si os dáis cuenta, las crucifixiones están subiendo de nivel, de aquí a nada subimos a la cruz al trío lalala, Dave Weckl, Vinnie Colaiuta y Steve Gadd...., el que esté libre de irse de tempo, que tire la primera piedra, hagan sitio. :)
Hombre
Carles, todos esos baterías -menos el Txus- son grandes baterías nos gusten o no, y han hecho grandes cosas, eso es innegable. Pero tú sabes que describir una crítica a, por ejemplo, Ulrich, diciendo que eso es crucificarle, es completamente exagerado. A todos estos se les puede criticar por una o más cosas a cada uno, pero todos estaremos de acuerdo en que todos ellos han hecho grandes cosas y se han ganado el nombre que tienen. Otra cosa es empezar a oír gente diciendo que Ulrich o Portnoy son lo mejor que se ha oído nunca. Pues va a ser que no...
Yo lo que digo de Chad Smith -y de Portnoy, y de mucha más gente- es que malgasten su talento prestándose asrastrar su imagen por el fango tocando de forma penosa, como en este vídeo. No sabe ni siquiera cuándo acaba el puñetero medley, simplemente deja de dar golpes y ya está.
Los RHCP están acabadísimos, y sus discos y canciones son ridículos ya hace demasiados años. Fui a verles a la gira del "Californication" en Badalona. Anthony Kiedis lo hizo de puta pena, John Frusciante, pobre, no da para más y mejor no meterse con él, supongo. Flea, como siempre, hiperactivo y peleón, saltando y riendo, en esa pose eterna suya, que de tan eterna no sabes si es auténtica o es sólo una pose, pero bueno, el tío es una caña y toca de muerte. Ahora bien, Chad Smith dio lo que se dice un recital. Improvisó, puso mil variaciones y golpes sorpresa, se le notaba en la cara que se estaba divirtiendo y quería tocar, era intenso y cuidadoso, y por supuesto se le puede describir mejor como alguien que está entre ser un reloj y ser un tren.
Del Chad Smith de esa época al que yo he visto en ese vídeo va un mundo, y no siento ningún placer en escribir esto...