Jerito, dos cosas:
1.- Los vehículos a motor no contaminan cada vez más, contaminan cada vez menos.
Los vehículos a motor con consumen cada vez más, consumen cada vez menos.
La energía (y hablo básicamente de petróleo, sus derivados y electricidad) que cuesta fabricar un nuevo vehículo ecológico, más los costes de reciclar los antiguos, más la contaminación que el proceso produce, es mayor que el ahorro en combustible y contaminación que ahorra ese nuevo vehículo. No es una opinión, es un dato comprobado cien veces por un montón de estudios.
No parece que la bicicleta sea el medio más eficaz para sustituir coches, furgonetas, motos y camiones, si bien es cierto que hay que fomenta su uso, sobre todo para mejorar la salud de la gente que conduzca esas bicicletas. ¿Pero sabes qué? Resulta que ya se hace, y con muchisimo éxito. El número de ciclistas urbanos de nuestro soleado país se ha multiplicado por mucho en estos diez últimos años. Así que estás pidiendo algo que ya ha sucedido y que no tiene absolutamente nada que ver con el motor.
Como todo el mundo que conduce y se fija un poco sabe, van a suceder dos cosas:
a) que nadie ve a obedecer esa norma absurda porque nadie va a poder controlar todos los vehículos de las autopistas. En cuanto a los radares, todo el mundo frena y luego acelera de nuevo. Y hay otra consecuencia: si empiezas a dejar a todo el mundo sin puntos, el país se paraliza, Es por eso que ya no te quitan puntos por un exceso moderado de velocidad. O sea, la norma es absurda e inaplicable.
b) que ir a 110 NO AHORRA COMBUSTIBLE, como demuestran un montón de estudios, porque no se trata del motor, se trata de CÓMO se conduce, y cuando más coches hay (horas puntas de primera y última hora) es cada día y van a 30-40 por hora máximo por las retenciones, y paran y arrancan en primera, que contamina muchísimo más que ir a 80, 110 ó 120 por hora. Y frenar todo el rato consume y contamina más.
2.- El problema no es la velocidad de los coches. El problema es doble: es técnológico por un lado (no tenemos alternativa técnica a lo que hay) y político-económico: la dependencia de fuentes energéticas finitas y la ausencia de un sustitutivo.
De hecho, si en Sudamérica empieza todo el mundo a cultivar para producir biocombustibles, el precio de los alimentos básicos subirá y subirá, y luego subirá más.
Ya lo he dicho antes, esto es muuuuuy complicado, y lo único que parece es que vivimos los últimos coletazos de un mundo de abundancia que probablemente dejará de existir muy pronto, y nosotros, los occidentales, vamos a tener que rebajar nuestras "exigencias" vitales... Llevamos años creyendo que lo tenemos todo garantizado porque somos así de guapos, y va a ser que no...