Hola Sawesa,
Hay dos conceptos clave en tu exposición que parecen indicar la naturaleza de tus problemas, y ambos caen bajo la rúbrica del Condicionamiento pero debemos enfocarlos de formas diferentes.
1. "Pierna Palo":
En este caso entramos en el dominio del Condicionamiento Clásico (como el de los perros de pavlov). Ante el incremento de la velocidad (estímulo) se produce un reflejo muscular que endurece la articulación. Podría considerarse como una "respuesta incondicionada", que significa que nos viene de serie. Esto es absolutamente normal y nos pasa a todos. Lo bueno es que es un tipo de reflejo que se puede "condicionar". Esto es, puedes ligar el estímulo (incremento de la velocidad) a otra respuesta, la "respuesta condicionada" (relajación de la articulación). Lo malo, has de trabajar la secuencia exacta del movimiento de la misma manera que quieres ejecutarla: de forma relajada, durante un periodo suficientemente largo para sustitur al reflejo. Un problema que te encuentras es que practicar despacio no implica que puedas tocar rápido. Tocar despacio sirve para codificar el patrón de movimiento en tu memoria muscular (técnicamente "memoria procedimental"), pero después tendrás que ir aumentando la velocidad para que sea una herramienta útil en tu arsenal. Esto debe ocurrir tanto de forma progresiva como escalonada. Estos dos procesos tienen temporalidades distintas.
La progresiva consiste en aumentar poco a poco los bpm, en cuestión de días o semanas. Conviene llevar un control de las velocidades y las sensaciones correspondientes a cada día para que puedas ver el progreso objetivamente, aunque no lo sientas emocionalmente en cada momento en particular (esto será importante para manejar la frustración, de la que hablaré después - no estamos preparados para reaccionar emocionalmente a mejoras lentas y progresivas a medio/largo plazo)
La escalonada hace referencia a explosiones de velocidad en periodos muy cortos de tiempo - cuestión de segundos (por ejemplo, hacer 3 sets de dobles en corcheas con un silencio de negra en medio, seguidos por 2 sets de dobles a semicorcheas con un silencio de corchea en medio (1& - 3& - 1& - 3e 4e)). Es muy importante que las explosiones de velocidad ocurran
al límite de tu capacidad, definida como
el momento en el que el reflejo de tensión empieza a aparecer - no en la velocidad máxima que consigas sacar a la fuerza. De esta forma, estarás siempre por debajo del umbral de activación y darás la oportunidad a tu sistema nervioso a adaptarse a las caraterísticas de la demanda. Poco a poco ese umbral irá aumentando y podrás aumentar tanto la velocidad como la duración de las explosiones, y las conexiones neuronales relevantes se irán fortaleciendo y el movimiento será cada vez más automático, lo que liberará recursos atencionales que podrás dedicar a otra cosa. Por eso es importante codificarlo bien desde el principio.
(Artículo al respecto - en él achacan el proceso al condicionamiento operante por la manera en la que son capaces de manipular los reforzadores. Pero en nuestro caso al ser reflejos tan básicos y asociaciones simples sin reforzamiento explícito me parece más apropiado hacer referencia al pavloviano/clásico.
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4051236/)
2. Frustración.
Este es un fenómeno fascinante, en el mundo del Condicionamiento Operante (BF Skinner y compañía) se conoce como "Explosión de Respuesta", y gracias a estos investigadores conocemos que compartimos estas conductas con otros animales. (Artículos al respecto en español:
https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-48082009000200005 -
http://pepsic.bvsalud.org/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0120-05342007000300024 )
La frustración ocurre cuando se presenta una cierta secuencia de acción-reforzamiento en la que después de varias apariciones del reforzador, este se elimina y desemboca en una repetición efusiva (agresiva en su versión extrema) de la conducta. Como cuando algo te empieza a salir pero ni siempre ni, bien del todo - momento en el que aceleramos el tempo impulsivamente y aumentamos los errores en lugar de hacer lo contrario (bajar el tempo lo suficiente para que podamos pensar en cada golpe de forma individual y ejecutarlo de forma precisa).
Es una respuesta emocional automática y aversiva que aparece cuando se dan las condiciones apropiadas, tanto en humanos como en perros, ratas y palomas. Sale de nuestra parte más animal y no se puede hacer nada para desconectarla del todo, únicamente se puede aprender a vivir con ella. Es importante que cuando ocurra sepamos distinguir entre, por un lado, la frustración como parte normal del proceso de aprendizaje (siempre habrá algun aspecto de la batería cuya curva de aprendizaje oscile de la manera óptima para disparar frustración), cuando ocurra esto no hay más que respirar, tener paciencia y seguir con el plan durante el tiempo/repeticiones asignado. Y, por el otro, cuando está surgiendo porque la metodología que estamos siguiendo no es apropiada y no nos permite avanzar, momento en el que hay que revisar el plan general. Esto es mucho más fácil decirlo que hacerlo, pero aprender a distinguir la situación es clave para nuestro progreso como músicos, baterías y personas con ímpetu de aprender.
Esta respuesta parece eminentemente teórica pero no ha de leerse así, sino como soporte para el enfoque general de tu estudio en la batería. Ejercicios específicos hay por doquier, lo que falta es paciencia y confianza en el proceso. Eso es lo que intenté transmitir con toda esta verborrea.
Mucha suerte en tu camino hacia la excelencia.