Copio el mensaje que ha puesto mi bajista en su foro. Esta es nuestra experiencia con Mago de Oz y el tal Txus este.
Sé que se ha hablado mucho y muy mal de estos tipos en el foro, pero aún así me gustaría contar lo que nos pasó anoche tocando con ellos.
Situación: festival de rock de mi ciudad. Tocábamos justo antes que ellos. 300-400 personas. Empezamos a tocar y notamos que el público está mayoritariamente conformado por chavales de 15 a 20 años con camisetas negras, sus fans. No es nuestro público, pero había buen rollo y escuchaban atenta y respetuosamente nuestro concierto. En esto que llegan los Mago y Txus tiene la feliz idea de subirse al escenario y pasearse por él, por la parte de atrás de mi batería, no por detrás del telón, mientras saludaba a unos y otros. El público lo ve y reacciona de la manera más normal: gritando, aplaudiento y jaleando, lo cual nos despistó y nos desconcentró. El tipo siguió en el escenario un rato, seguramente hasta que hubiera satisfecho su necesidad de atención y admiración por parte de sus fans, pero en lugar de bajarse del mismo se le ocurrió sentarse a su "batería" (aquello llevaba unos cacharros muy raros) y ponerse a tocarla MIENTRAS NOSOTROS ESTÁBAMOS TOCANDO. El público no lo notó, pero cualquiera que haya tocado en un grupo sabe lo que pasa cuando de repente escuchas dos baterías al unísono. Caos, desconcierto y ganas de matar al tipejo este.
Segunda parte: acaba el concierto y nuestro batería quiso ir a decirle a Txus que no le había parecido bien cómo había actuado, sin ánimo de bronca ni de historias, sólo comentarle que esas cosas no se hacen. A pie de camerinos le dice al pipa, o al manager, o al camello (no lo sabemos) que quiere hablar con el batería, por favor. Al cabo de unos minutos se abre la puerta de su camerino y aparece el tipejo este echo una furia y gritando. Se encara con mi batería y le suelta perlas del tipo: "¿pero quién te crees que eres?", "no eres nadie", "más humildad, chaval", "esto es rock and roll". Su actitud agresiva provocó que fuera imposible mantener una conversación normal con él, pues se le veía con ganas de llegar a las manos, así que tras unos cuantos gritos e improperios más la cosa quedó ahí. No somos de liarnos a ostias con nadie, aunque ganas nos dieron.
La guinda final: mientras les estaban haciendo una entrevista para un medio local, un integrante de otro de los grupos que tocaban hizo un calvo, no sé bien a quién o hacia dónde. El caso es que eso, a los Mago, como son personas respetuosas y decorosas, les pareció fatal, así que llamaron a la organización y exigieron que la seguridad del festival se pusiera en la entrada de la zona de los camerinos para impedir que entrara la gente. NADIE pudo entrar a menos que acreditara que era músico, y aún así sólo nos permitieron ir al camerino a recoger los instrumentos. Echaron a 4 grupos de allí, aparte de a personas acreditadas que tenían todo el derecho del mundo de estar donde les saliera de los cojones. Por un calvo. ¿No querían actitud "rock and roll"?
Sobre su concierto, que tuve la desgracia de presenciar, no voy a hablar porque creo que todo el mundo sabe cómo suena esta gente actualmente y cuál es su lugar en el mercado de la música patria.
En fin, Mago de Oz, viva y bravo.