Hombre, a mi cuando me han invitado ha sido por ser "ayudante" del evento o porque alguien del grupo me ha puesto en la lista de invitados, y generalmente, porque andaba mal de pasta, porque no tenia previsto ir a ese concierto, o por la mezcla de las dos cosas. Y de esos últimos, la última vez que pasó fué en un concierto de "El hombre delgado", el cual moló un puñao, pero en el público había una peste a gentuza...
![<img src="{SMILIES_PATH}/eusa_whistle.gif" alt=":-\"" title="Whistle" />](data:image/gif;base64,R0lGODlhAQABAIAAAAAAAP///yH5BAEAAAAALAAAAAABAAEAAAIBRAA7 "Silbando <img src=\"{SMILIES_PATH}/eusa_whistle.gif\" alt=\":-\\"\" title=\"Whistle\" />")
Pero el colarse "porque si" o por ser "familiar/conocido de" pues como que no mola, e incluso es razón de más para pagar. Yo Tampoco obligo a mis amigos para que paguen por verme, de hecho, al comunicar a la peña algún concierto mío, hago especial hincapié en si el concierto es gratuito o no. Pero si elijes venir a verme i yo no te puedo meter en una lista de invitados, lo siento, pero has de pagar.
Otra cosa es cuando me ha tocado ser portero de eventos, en los que ves el ambiente desde otra perspectiva.
Porque no toda la peña se comporta tal y cómo os comportásteis vosotros en la entrada del auditório durante la kedada de este año, que, y si no lo he dicho antes, lo digo ahora,
dió gusto currar con público así.
Currando de portero/vendedor de entradas me he visto de todo: peña que se hace el tonto 3 o 4 veces (y te toma por tonto a ti), por lo general, gente de 40 tacos con aire cultureta que te dice que entra un rato y se va, o te dice que no sabía que había que pagar, el típico punki que te suelta "mira, solo tengo esto en la cartera, yo te lo doy y tu me dejas entrar", el que va a entrar por cojones, el que te los hincha intentando colarse con una sonrisita y un buenrrollismo infinitos (pero tu ten cuidado de tener una mala palabra y te la monta), o el adalide de la cultura libre que te monta una discurso revolucionário por 3 euros de entrada. Y aparte, los amigos del músico, obviamente.
En fin, que en mi opinión, el problema se resume en:
- Aquí la pasta no nos sobra.
- La cultura, y los eventos culturales, no se valoran ni desde las instituciones ni desde el público
- La picaresca española, que hará lo posible por obtener duros por 4 pesetas.
- Y la idea de que todos son tan ruines como lo querríamos ser nosotros, ergo, se están aprovechando de mí, ergo, yo tengo todo el derecho y el deber de aprovecharme de ellos.
