¡Buenas!
No sé si hay espacio para las presentaciones, no lo he encontrado y pensé que aquí estaría bien...
Aquí una supernovata, pues solo hace tres meses que le estoy dando, pero me ha picao el bicho bien y estoy enganchada totalmente, ¡esto es un vicio!
El caso es que este año decidí meterme con la música porque lo sentía como una asignatura pendiente en mi vida (y con 39 años más vale no dejar las cosas "pender" mucho más...) y pensé primero dar clases de piano. El caso es que en la primera clase de piano, el profesor me llevó a la batería para hacer un ejercicio sencillo porque según me dijo sería bueno para independizar manos y eso, y yo cuando me senté allí tocando ese patrón sencillo... se me iluminó la cara, se me abrieron los ojos como platos y se me puso una sonrisa de oreja a oreja.
A la tercera clase le dije al profe: "paso del piano, vamos directos a la batería". Luego la buena suerte hizo que cayera en mis manos la vieja batería de un amigo que ahora está con otros instrumentos... Y entonces me la monté en casa, me busqué otro profe más adecuado (baterista) y ahí ando, haciendo ejercicios básicos, y una clase con el profe de vez en cuando para comprobar que voy haciendo lo que tengo que hacer (técnica y postura básicamente). Ojalá tuviera más tiempo para dedicarle, pero bueno, procuro darle cada día aunque sea una horita.
Y nada, pues que encantada de estar por aquí.
Da gusto saber que hay tanta información a mano y también gente con quien poder compartir las cosillas del camino... que a los amigos los tengo ya aburridos.
No sé si hay espacio para las presentaciones, no lo he encontrado y pensé que aquí estaría bien...
Aquí una supernovata, pues solo hace tres meses que le estoy dando, pero me ha picao el bicho bien y estoy enganchada totalmente, ¡esto es un vicio!
El caso es que este año decidí meterme con la música porque lo sentía como una asignatura pendiente en mi vida (y con 39 años más vale no dejar las cosas "pender" mucho más...) y pensé primero dar clases de piano. El caso es que en la primera clase de piano, el profesor me llevó a la batería para hacer un ejercicio sencillo porque según me dijo sería bueno para independizar manos y eso, y yo cuando me senté allí tocando ese patrón sencillo... se me iluminó la cara, se me abrieron los ojos como platos y se me puso una sonrisa de oreja a oreja.
A la tercera clase le dije al profe: "paso del piano, vamos directos a la batería". Luego la buena suerte hizo que cayera en mis manos la vieja batería de un amigo que ahora está con otros instrumentos... Y entonces me la monté en casa, me busqué otro profe más adecuado (baterista) y ahí ando, haciendo ejercicios básicos, y una clase con el profe de vez en cuando para comprobar que voy haciendo lo que tengo que hacer (técnica y postura básicamente). Ojalá tuviera más tiempo para dedicarle, pero bueno, procuro darle cada día aunque sea una horita.
Y nada, pues que encantada de estar por aquí.