Me dirigía a casa luego de entrenar en el gimnasio cuando de repente escuché en la radio el anuncio de que el actor Patrick Swayze murió, a los 57 años, tras una batalla dura contra el cáncer al páncreas. Me salió una lágrima, la verdad, porque esa enfermedad me toca mucho.
Fue como una especie de duelo que explica la psicología porque, de alguna manera, la muerte de Patrick me hizo recordar que este mal también se llevó a mi madre hace unos tres años. Este mal ya toca muchas familias a nivel mundial y no hay quién lo pare.
Aún recuerdo cuando en marzo del 2008 fui uno de los primeros periodistas en el Perú que se atrevió a informar sobre el diagnóstico de Swayze, basado en el diario estadounidense National Enquirer.
Lo sé, lo sé. Muchos hombres de prensa no se animan en confiar en este medio de comunicación porque, algunos, lo consideran poco serio. Pero yo sí lo hice y no me equivoqué; y mi jefe de ese entonces, Pedro Rivas, me avaló. Luego, como era natural, empezó el rebote a diestra y siniestra. El resto es historia.
Me he propuesto a recordar a Patrick Swayze en sus mejores momentos. Siendo estrella de la cinta Dirty Dancing y Ghost, eso es básico. Sin embargo, lo que pocos saben es que este actor, nacido en Houston, Texas, también fue cantante. Compuso y cantó un tema que tuvo mucho éxito en 1987, el cual se llama She’s Like The Wind y fue parte del soundtrack de la película Dirty Dancing.
El corte tiene un videoclip grabado en blanco y negro. Patrick aparece cantando en buena parte de la canción. Se lo hice escuchar a mi hermana Rosario y me dijo que le hacía recordar a Kenny Rogers. La verdad, más o menos, yo creo que Swayze tiene su propio estilo. Qué pena que no se haya dedicado a cantar más porque no lo hacía nada mal.
No obstante, fue un gran actor y, parece, nunca quiso dejar de serlo. Con la enfermedad a cuestas, grabó la serie The Beast. En la producción interpreta a Charles Barker, un policía de Chicago con métodos poco tradicionales.