Este es un tema que podría considerarse de permanente actualidad, pues es difícil suponer que por aquí haya sólo bateristas con la experiencia tal que ningún público les produzca temor, y no necesiten algún consejo. Al respecto recomiendo acercarse a un grupo de teatro para conocer los ejercicios que los actores suelen aprender para evitar los efectos de la tensión, y de los que recuerdo dos bastante eficaces : 1) 'Lanzar' con violencia los dedos hacia el suelo, como si uno quisiera clavarlos en el piso 2) Girar los antebrazos haciendo molinetes. Más lento es imaginar que uno va 'abandonando' cada pieza del cuerpo, desde los dedos del pie hasta las orejas (algunos se duermen cuando van por los codos, o antes). Pero, en mi propia experiencia, nada es mejor que haber realizado suficientes ensayos, de modo que el cerebro controle todo por su cuenta, y la consciencia, muy segura de sí misma, se preocupe únicamente de mantener la concentración destinada a dar detalle y sabor, es decir, que el público escuche lo que solamente es un buen ensayo más...el mejor. (También vale el truco que se utiliza para decir discursos relajadamente; escoger una persona de las más próximas, e imaginar que se está tocando sólo para ella)